10 futbolistas que tuvieron problemas con la cocaína

Este central italiano jugó en Italia y en España. Dio positivo cuando jugaba en el Ravenna, en la Serie B de Italia. Antes, había disputado gran parte de su carrera en la Juventus, con la que consiguió cuatro Scudettos y tres Supercopas. Se retiró en 2012.

La historia de Julio Alberto es una tragedia marcada por las drogas después de una etapa brillante como centrocampista en el Atlético y el Barcelona, con el que fue campeón en la 84-85. Comenzó su contacto con la cocaína durante la etapa de Maradona en el Barcelona. Lo pasó tan mal que hasta intentó suicidarse. Por suerte, en la actualidad se encuentra rehabilitado.

Retirado en junio de 2010, Flachi, quien pasó por hasta seis equipos de Italia, también dio positivo dos veces por cocaína, claro reflejo de su adicción. En 2007 -jugaba en la Fiorentina- fue suspendido por 16 meses, y en 2010 por 12 años.

Considerado uno de los mayores talentos del fútbol yugoslavo durante la guerra de los Balcanes, Curcic desarrolló gran parte de su carrera en la Premier League y aunque nunca llegó a dar positivo, luego de colgar las botas a los 29 años confesó que se había gastado todo el dinero que ganó como profesional en cocaína y prostitutas. Curcic llegó a caer en la indigencia, pero ahora está rehabilitado y es una celebridad en Serbia.

El guardameta australiano Mark Bosnich llegó a jugar en el Manchester United y en el Aston Villa. Dio positivo por cocaína en 2002 cuando jugaba en el Chelsea. El club lo despidió y fue sancionado durante nueve meses. El portero admitió que se gastaba 6.000 euros semanales en ‘coca’, unos 10 gramos diarios. se regeneró y en 2008 pudo volver al fútbol, para retirarse un año después.

Merson, excapitán de la selección inglesa y del Arsenal, confesó en una rueda de prensa en 1994 su adicción a la cocaína. La FA (Federación Inglesa de Fútbol) lo ayudó a ingresar en un programa de desintoxicación. Pudo regresar al fútbol e incluso jugar un Mundial con Inglaterra. Actualmente es comentarista.

El delantero rumano dio positivo por cocaína cuando jugaba en el Chelsea de la Premier League. Fue todo un escándalo ya que los ‘blues’ habían pagado un auténtico dineral por su fichaje y Mutu tuvo que indemnizarles. La FA lo suspendió siete meses y le otorgó una multa de 20.000 libras. La FA inglesa consideró como atenuante el arrepentimiento del jugador y que no es una droga que mejore el rendimiento. Se retiró en 2016 en un club de su país natal.

Amigo íntimo de Diego Armando Maradona, el delantero argentino también dio positivo por cocaína cuando jugaba en Italia. Fue en marzo de 1993, precisamente tras un partido de su equipo, la Roma, ante el Nápoles. El haber dado positivo le costó una sanción de 13 meses. El atacante ha sufrido recaídas constantes desde entonces.

Procedente de Colombia, el país que lidera la producción mundial de esta droga, Higuita dio positivo cuando jugaba en el Aucas de Ecuador. Higuita, que jugó en el Valladolid, era íntimo amigo del famoso narcotraficante Pablo Escobar, al que llegó a visitar en prisión. Actualmente está rehabilitado y es entrenador de porteros en el Al Nassr FC, de Arabia Saudí.

Tal vez el caso más sonado del fútbol. Estuvo sancionado en Italia y reincidió en Boca Juniors, aunque toda su carrera estuvo marcada por sospechas alrededor de esta droga. El propio Maradona en su libro Yo soy el Diego, aseveró que los primeros contactos con la cocaína tuvieron lugar en su estancia en el FC Barcelona. Los siguientes años de su carrera fueron una pelea constante contra su adicción, que en el año 2000 le llevó a La Habana, invitado por Fidel Castro, para rehabilitarse. Maradona superó su dependencia y años después iniciaría una carrera como entrenador.

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Ely Reyes/Ciudad VLC