Cerca de 19 millones de dólares consiguieron Brasil y Colombia por parte del gobierno de Estados Unidos (EEUU) con la magnificación de la migración y la campaña xenofóbica que ha emprendido la gestión del Presidente Juan Manuel Santos contra los venezolanos en los últimos meses.
Así se desprende de los anuncios que ha realizado el gobierno estadounidense en las últimas semanas. Por ejemplo, el pasado 20 de marzo, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) anunció que donará 2,5 millones de dólares para «ayudar» a Colombia supuestamente a paliar las dificultades que implica la alta migración de ciudadanos venezolanos a su territorio.
Según la Usaid los fondos se destinarían a «organizaciones humanitarias» y la donación tiene «efecto inmediato», reseñó en esa oportunidad Sputnik.
Un mes después, el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, tras reunirse con el dirigente de Primero Justicia, Julio Borges y el prófugo de la justicia, Antonio Ledezma, en Lima, Perú, anunció que el gobierno de Donald Trump, aumentará en 16 millones de dólares la «ayuda humanitaria» para los venezolanos que se fueron del país.
En el encuentro que tuvo lugar en el marco de la VIII Cumbre de las Américas, Pence indicó que parte de los recursos irán a comunidades de acogida en Colombia y Brasil, reseñó el pasado 14 de abril Europa Press.
Los 18,5 millones de dólares que han sido anunciados hasta el momento, no representan ni siquiera el 5% del total que aspira conseguir Colombia y que se ubica en 60 mil millones de dólares, como anunció el pasado 9 de febrero, el ministro de Hacienda neogranadino, Mauricio Cárdenas.
En una entrevista que concedió a Reuters, y que el medio reseñó el pasado 9 de febrero, Cárdenas, informó que su país ha contactado a agencias crediticias internacionales para preparar un plan de rescate financiero por unos 60.000 millones de dólares para Venezuela si el presidente constitucional, Nicolás Maduro deja el poder. «¿Qué ocurre cuando Maduro caiga? Nosotros no deberíamos improvisar. Debería existir un plan, porque Venezuela necesitará apoyo financiero».
En esa oportunidad, Cárdenas, quien no mencionó que Colombia es el primer país del mundo con el mayor número de personas desplazadas (hasta 2017 tenía 7 millones), aseguró que su gobierno estaría dispuesto «a brindar financiamiento para esa transición».
Esta propuesta la volvió a repetir Cárdenas el pasado 19 de abril, cuando propuso en el Fondo Monetario Internacional (FMI), un «rescate financiero» para Venezuela por 60 mil millones de dólares, para «estabilización macroeconómica», que se aplicaría cuando haya un Gobierno dispuesto a tomar las «políticas económicas correctas».
En entrevista a EFE, en el marco de su participación en la asamblea de primavera del FMI, en Washington, dijo que participaría en una reunión con diversos ministros de Hacienda, entre ellos el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, «para hablar de quiénes podrían financiar, de quién pone la plata (…) Y ahí se necesitará al FMI, al Banco Mundial, al Banco Interamericano de Desarrollo».
El jefe de Estado, Nicolás Maduro, denunció el 15 de febrero que laboratorios mediáticos aumentan cifras de la migración venezolana, y señaló que el número de migrantes es muchísimo menor a las estadísticas que tratan de posicionar algunos presidentes del grupo de «derecha anti venezolano llamado ‘Grupo de Lima’, quienes tratan de presentar a los medios de comunicación que hay un éxodo masivo».
No es la primera vez, que EEUU, a través de varias organizaciones, destina recursos para incidir en los asuntos políticos del país. De hecho, entre 2005-2015, la Fundación Nacional para la Democracia (NED por sus siglas en ingles), destinó un total de 15 millones 601 mil 945 dólares a varias Organizaciones No Gubernamentales (ONG) en Venezuela.
A esa cifra hay que sumar los 9 millones de dólares que Estados Unidos tiene presupuestado destinar para supuestamente “promocionar la democracia, los derechos humanos y la libertad” en Venezuela, de acuerdo con el informe de presupuesto del Departamento de Estado 2019, que se conoció en febrero de este año.
Estas ayudas se canalizan a través de la (Usaid), la misma agencia que ya donó 2,5 millones de dólares para «ayudar» a Colombia.
Ciudad VLC / W.H / AVN
