El gobierno de Estados Unidos, en otra muestra de hipocresía frente al tema de los derechos humanos, bloqueó este lunes la adopción de un comunicado del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) que pide una investigación independiente sobre la última matanza de los palestinos por parte del régimen de Israel.

 

Fuentes diplomáticas informaron sobre el rechazo de Washington al votar en contra del proyecto de resolución que en una parte indica que “el Consejo de Seguridad expresa su indignación y su tristeza ante la muerte de civiles palestinos que ejercen su derecho a manifestarse pacíficamente”.

 

En la nota, obtenida por la agencia francesa de noticias AFP, el CSNU dice que resulta imprescindible la realización de “una investigación independiente y transparente” sobre las acciones aplicadas por el régimen sionista contra los palestinos con el fin de garantizar que “se rindan las cuentas” pertinentes.

 

 

Por otro lado, se refiere a la decisión de Washington de declarar la ciudad de Al-Quds (Jerusalén) capital del régimen israelí y de haber trasladado la embajada estadounidense de Tel Aviv a la ciudad santa, este lunes 14, que coincidió con el 70.º aniversario de la creación del régimen ocupador israelí y el Día de la Nakba (de la catástrofe), que marca la salida de los palestinos de sus hogares.

 

En línea con el enorme rechazo a nivel mundial ante la mudanza de la sede diplomática estadounidense a la urbe sagrada, el Consejo de Seguridad hace hincapié en que cualquier medida que pretenda modificar el estatus o la composición demográfica de Al-Quds “no tiene ningún efecto jurídico, es nula y no legítima y tiene que ser anulada de acuerdo con las resoluciones pertinentes” del organismo internacional.

 

La frontera entre la asediada Franja de Gaza y los demás territorios palestinos ocupados fueron escenario de masivas manifestaciones este lunes, con decenas de miles de palestinos repudiando la inauguración de la ilegal embajada de EE.UU. en Al-Quds.

 

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Al menos 58 palestinos han muerto, entre ellos 8 niños, y más de 2.400 han resultado heridos por los disparos de los soldados israelíes, quienes usaron bombas lacrimógenas y munición real contra los manifestantes.

 

Esta acción de EE.UU. contradice enormemente su supuesta preocupación por los derechos humanos, idea repetida una y otra vez durante sus ataques contra el gobierno venezolano por su manejo de las violentas protestas y actos terroristas, protagonizadas en 2017 por la oposición venezolana para derrocar al gobierno constitucional de Nicolás Maduro. Cabe recordar que a diferencia del régimen israelí, las fuerzas armadas venezolanas tienen prohibido usar armamento letal contra manifestantes, así estén ejecutando hechos extremos de violencia.

 

Ciudad VLC / Con información de HispanTV

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