El imperialismo, con toda su maquinaria de inteligencia, no ha logrado descifrar el código de la venezolanidad, afirmó el canciller venezolano, Jorge Arreaza.
Esta afirmación la realizó durante su disertación en el foro Geopolítica de los recursos naturales de Venezuela, Arco Minero del Orinoco y su impacto en la doctrina económica de dominación y emancipación, realizado en la sede de la Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada (Unefa), en Caracas.
“La cultura del venezolano está constituida por un “código” que no ha podido ser descifrado por el imperio estadounidense». Asegura que aún con sus herramientas tecnológicas y sus avanzados organismos de inteligencia, el poder hegemón mundial no logra desentrañar el significado de la venezolanidad.
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El imperialismo con toda su maquinaria no puede con la venezolanidad
“(…) Es parte del código que los Estados Unidos (EEUU) por más que utilice la CIA, por más que tenga herramientas tecnológicas, no logra descifrar la venezolanidad, no logra entender a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, no logra entender al chavismo, no logra entender al más pobre de los venezolanos que no da su brazo a torcer ni con bloqueo ni con propuestas ni con cantos de sirenas, y se mantiene firme ante la dificultad”.
El canciller basó su opinión en las ideas del intelectual de derecha Arturo Uslar Pietri, para quien el “concepto de nacionalidad está muy estrechamente vinculado con el proceso de independencia, y si esta hubiese sido diferente seguramente el concepto que tenemos de nosotros mismos sería distinto”.
“(…) La guerra de independencia en Venezuela “, continúa el escritor venezolano, “se caracterizó por muchos rasgos muy peculiares: uno fue el desproporcionado papel que Venezuela tuvo dentro del proceso de independencia de la América Latina, que aún seguimos jugando. (…) En 1810 Venezuela tenía 700 mil habitantes y un circulante de 700 mil pesos, eso era todo lo que tenía el país. Ese paisito que ni siquiera era un virreinato, que era una modesta capitanía general, tomó el liderazgo del proceso de independencia de la América del Sur y lo llevó a término. Eso era una cosa verdaderamente milagrosa, increíble, que por más que uno trate de explicarla no le encuentra explicación. ¿Con qué base podían aquellos hombres hacer eso? ¿Qué tenían detrás?, nada. Lo hicieron puramente a base de personalidad”.
Para Arreaza el texto reafirma por qué el imperialismo mundial no ha logrado su objetivo histórico de apropiarse de los recursos naturales que hay en el territorio venezolano.
Una pretensión que nació con la búsqueda del Dorado por parte de los conquistadores españoles y continúa hoy, con el empeño estadounidense de apropiarse del petróleo, el oro, el níquel, el coltán, el agua y el hierro, entre otros minerales presentes en la geografía nacional.
“Efectivamente, el Dorado está aquí en Venezuela, y parte de ese Dorado está hoy ordenado con un plan (…) en el Arco minero del Orinoco y las riquezas inmensas que están en esa zona del país”, afirmó el canciller.
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Ciudad VLC/Correo del Orinoco
