El rey emérito español Juan Carlos I viajó a República Dominicana luego de abandonar su país; un viaje que corresponde a su “voluntad de trasladarse, en estos momentos, fuera de España”.
En una carta difundida este lunes por la Casa Real española y dirigida al actual monarca, Felipe VI, Juan Carlos I comunica su «meditada decisión» de trasladarse fuera de su país.
«Deseo manifestarte mi más absoluta disponibilidad para contribuir a facilitar el ejercicio de tus funciones, desde la tranquilidad y el sosiego que requiere tu alta responsabilidad», le escribe el rey emérito a su hijo en el comunicado, que según varios medios españoles se habría publicado cuando el exmonarca ya se encontraba fuera de España.
A propósito de esta huida del exmonarca español a la isla caribeña, se han producido muchos comentarios condenatorios a través de las redes sociales, como el del ministro de la Cultura venezolano Ernesto Villegas, quien se pronunció al respecto a través de su cuenta Twitter:
https://twitter.com/VillegasPoljak/status/1290608912685826049?s=20
Por otra parte, varios medios de prensa españoles informaron el paradero final de Juan Carlos I antes de buscar un nuevo destino y donde en carta a su hijo, el rey Felipe, expresa que lo hacía “ante la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de mi vida”.
Esta medida contra el rey emérito se anuncia cuatro meses después de que Felipe VI decidiera poner fin a la asignación anual que recibía su padre –unos 194 mil euros provenientes de los fondos públicos– y renunciara públicamente a cualquier herencia de las cuentas de Juan Carlos I en el extranjero.
Un soborno saudí de más de € 80 millones
El rey emérito está sujeto a una investigación de la justicia española y suiza por el supuesto soborno cobrado en un contrato de tren de alta velocidad en Arabia Saudí.
La Fiscalía del Tribunal Supremo de España asumió el pasado mes de junio la investigación sobre la posible implicación del rey emérito en el supuesto cobro de comisiones ilegales en el proyecto de construcción del llamado «AVE del desierto», el tren de alta velocidad que une las ciudades de Medina y La Meca, en Arabia Saudita.
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Las sospechas sobre Juan Carlos I tienen su origen en la grabación de una conversación mantenida en 2015 entre el excomisario de Policía José Manuel Villarejo y la supuesta amante del rey emérito Corinna Larsen (antes Corinna zu Sayn-Wittgenstein).
En este encuentro, la mujer se refirió al supuesto pago de comisiones «para el tren», que habrían consistido en algo más de 80 millones de euros en total, de los cuales al menos una parte habrían terminado en manos de Juan Carlos de Borbón.
Ciudad VLC / con información de Telesur y RT
