El esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) avasalló a sus adversarios en una contrarreloj corta pero complicada en Bolonia, que dio estreno a la edición número 102 del Giro de Italia.
Sus triunfos en el Tour de Romandía, en la Tirreno-Adriático y en el Tour de Eslovenia le otorgaron un nivel de forma superior al resto y hoy, no sólo cumplió con los pronósticos, si no que también humilló de una manera primorosa a sus enemigos más cualificados.
Y es que Roglic selló el mejor tiempo, para enfundarse la ‘maglia rosa’ por delante del británico Simon Yates (Mitchelton-Scott) y de Vincenzo Nibali (Bahrein).
El Giro comenzó este año de manera anómala, pues debido a las malas previsiones climatológicas, los equipos decidieron que fueran sus “jefes de fila” quienes saliesen en primer turno y Roglic impuso su clara superioridad.
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El la jornada de inaugural, Primoz Roglic en sólo 8,2 kilómetros de recorrido, hizo un tiempo de 12 minutos y 54 segundos, lo que supuso 19 segundos menos que Simon Yates, 23 menos que Vincenzo Nibali, 28 segundos menos que Tom Dumoulin y Miguel Ángel López, y un minuto y siete segundos que Mikel Landa.
La tarjeta de presentación del Giro de Italia 2019 fue una contrarreloj de alta exigencia, con los primeros seis kilómetros en carreteras planas y los últimos dos en una subida al cerro de San Luca, con un promedio de pendientes del 9.7 % y cumbres del 16 %.
El primero en salir fue el holandés Tom Dumoulin (Sunweb), campeón del Giro en 2017, seguido en los minutos siguientes por los demás grandes favoritos de la víspera, como “Supermán” López, Nibali, Roglic y Mikel Landa, con el dorsal número 1 heredado tras la baja de Alejandro Valverde.
La segunda etapa se disputará este domingo, de Bolonia a Fucecchio con un recorrido ondulado de 205 kilómetros y con la escalada a Montalbano como subida más destacada.
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Ely Reyes/Ciudad VLC/Con información de EFE
