El museo se puede ver como un vehículo a lo absurdo y extravagante, ya que no todos los museos representan un halo resplandeciente de la «alta cultura».
Algunos, se enfocan en los aspectos más exóticos, extravagantes pasando por como se menciona de la nota por lo absurdo, para caer estrepitosamente en lo ridículo.
Más aún, han de saber que no importa cuán extraño, poco convencional o incomún sea el tema, probablemente exista un museo dedicado a él en algún rincón de nuestro desequilibrado (y no nos referimos al peso) planeta.
Sin embargo, estos tesoros repartidos alrededor del mundo satisfarán con seguridad a los buscadores más morbosos en su acuciosa búsqueda de cosas verdaderamente extrañas.
No obstante, ¿qué convierte a un objeto ordinario en algo extraordinario? Simplemente colocando ese objeto en un museo. No importa cuán aparentemente común o mundano, los objetos nos ofrecen ventanas a la historia y nos conectan con nuestro pasado. Exponen nuestras preocupaciones más oscuras, las ideas más brillantes y la creatividad ilimitada de la mente humana.
Cuando piensas en visitar un museo, probablemente pienses en una institución seria y reconocida, como el Museo del Louvre en París o el Museo del Prado en Madrid. Sin embargo, no todos los museos son tradicionales.
Existen muchos museos inusuales, que van desde lo extraño a lo francamente espeluznante o escatológico (no apto para estómagos sensibles, ni mucho menos mentes estólidas).
Y es que los museos son omnipresentes en nuestra sociedad; hay al menos uno en casi todas las ciudades importantes del mundo, la mayoría dedicados al arte o la historia.
Mientras que lugares como el MoMA (Museo de Arte Moderno de Nueva York), la Galería Uffizi de Florencia o The National Gallery de Londres son hitos culturales muy importantes, a veces nos gusta salir de lo habitual y probar algo un poco distinto.
Así mismo, hay todo tipo de museos extraños en el mundo que vale la pena visitar aunque sea solo por la novedad que representan. Aquí tienes una lista de los museos más extraños del mundo que probablemente desees visitar una vez en tu vida (o igual no).
Haremos un repaso por el Museo de la Caca (mejor conocido en Venezuela como ‘pupú’), el del pan, el del sexo, el de los collares para perros o el increíble y llamativo Museo Alien en Gruyères, Suiza. Encontrarás dónde localizar estos museos, su contenido y algunas curiosidades sobre los mismos.
A continuación la continuación de la última parte de una lista de espacios dispuestos para la exhibición de los objetos y extrañas colecciones.
18) Museo parasitológico
El Museo Parasitológico de Meguro es uno de los más originales que podemos encontrar en Japón. Inaugurado en 1953, en este museo puedes aprender todo lo que siempre quisiste saber sobre tenias, piojos y muchos otros parásitos curiosos.
La impresionante colección cuenta con más de 300 especímenes, incluyendo una tenia gigante de 9 metros de largo. ¡Impresionante! Es el único museo de parasitología del mundo y la entrada es gratuita.
19) Museo mütter
Otro museo no apto para personas sensibles. En el Museo Mütter de Filadelfia (EE. UU.) te encontrarás con las coleccionas más extrañas relacionadas con medicina y anatomía. Desagradable para algunos, interesante para otros.
Este museo (fundado en 1858), forma parte del Colegio de Médicos de Filadelfia y exhibe colecciones preservadas de rarezas médicas, muestras anatómicas, modelos e instrumentos médicos en un escenario del siglo XIX.
Los elementos más destacados del museo incluyen el tumor de mandíbula del presidente Grover Cleveland, el cerebro de Albert Einstein y la colección de cráneos humanos del Dr. Joseph Hyrtl.
20) Museo de belleza duradera
Probablemente no sea uno de los museos más visitados del mundo (tiene unos 2.000 visitantes al mes), pero el Museo de Belleza Duradera en la ciudad de Kuala Lumpur (Malasia) es definitivamente uno de los más inusuales.
Exhibe diferentes estándares de belleza desde la antigüedad hasta los tiempos modernos. Los ejemplos incluyen modificaciones corporales muy dolorosas tales como el limado de dientes, la perforación, la escarificación, el moldeado de cabeza o el estiramiento de labios.
21) Museo de alambre de púas
¿Es posible que las alambradas de púas tengan su propio museo? Así es. Tendremos que viajar hasta Kansas (EE. UU.) para encontrarlo.
Establecido en 1970 en una pequeña tienda en la calle principal en el centro de La Crosse, Kansas, el Museo de alambre de púas se dedica exclusivamente a la historia y la leyenda del alambre de púas.
El museo exhibe más de 2.400 variedades de alambre de púas; incluyendo muestras tradicionales fabricadas entre los años 1870 y 1890.
Por desgracia este objeto desempeñó un papel vital en la guerra de las trincheras durante la Primera Guerra Mundial, pues los soldados la utilizaban para ralentizar el ataque y aumentar el número de bajas de los ‘enemigos’ que quedaban atrapados en ellas.
22) Museo de la menstruación
Otro de los museos más extraños de nuestra selección es el Museo de la Menstruación. Está situado en el sótano de la casa de su fundador y curador Harry Finley, que vive en la parte de arriba en New Carrollton, Maryland, en Estados Unidos.
Desde 1995, Finley ha dedicado su vida a poner a disposición del público su colección privada de productos de higiene femenina y maniquíes alterados. Un museo dedicado a esa inevitable compañía con la que todas las mujeres deben compartir unos días al mes gran parte de su vida. Eso sí, lleva años cerrado (desde 1998), pero puede visitarse vía web.
23) Museo de la muerte
Situado en Los Ángeles, California, el Death Museum nos garantiza una visita macabra. La exposición está repleta de calaveras, canibalismo, referencias a la muerte, cabezas reducidas y todo tipo de instrumentos de sospechosa utilidad.
Así pues, se exhiben más de 5.000 objetos, fotografías y restos humanos, como la cabeza guillotinada de un asesino en serie francés, Henri Désiré Landru, sentenciado en 1922. También encontrarás una macabra ‘sala del suicidio’.
24) Museo del arte malo (como si todo lo que se muestra como arte hoy en día es, en si mismo, bueno)
La mayoría de las exhibiciones presentes en el Museo de Arte Malo no llegarían a las paredes de tu casa, mucho menos al Louvre… Pero aquí están. Más de 600 piezas, que en otros lugares inspirarían asentimientos educados y cumplidos poco sinceros, aquí tienen un lugar para brillar.
Situado «convenientemente al lado de los baños» en un antiguo sótano en Dedham, Massachusetts, el museo acepta solo arte que sea demasiado malo para ignorarlo. Flores deformes, retratos de colores brillantes… inolvidable el cuadro de «Lucy en el campo con flores», un verdadero icono que representa a un septuagenario aparentemente flotando en un campo de flores que se balancea lentamente. Para verlo, viaja a Massachusetts, Estados Unidos.
25) Museo del pan
En Alemania encontramos el Museo de la Cultura del Pan. Más de 18.000 exhibiciones muestran prácticamente de todo; desde los 6.000 años de historia del pan en obras de arte (artistas como Dalí o Pablo Picasso) hasta artefactos antiguos de panaderías que datan de la Edad de Piedra.
Sin embargo, asegúrate de llevarte algo de comer: a pesar de estar dedicado a este jugoso y vetusto manjar, no encontrarás ni un pan comestible dentro del museo.
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