Este viernes, el segundo partido de la jornada entre las selecciones e Marruecos e Irán, correspondiente al grupo B, se selló con una victoria persa gracias a un autogol marroquí en las postrimerías del juego.

 

Considerado por los fanáticos como uno de los partidos más aburridos de los últimos tiempos, el cotejo se desarrolló entre golpes, faltas, errores, fallas garrafales y, eso sí, terminó con algo de emoción.

 

Mucha fricción y poca precisión de cada lado convirtieron al compromiso que abrió la zona en un dolor de ojos. Apenas una buena intervención del arquero de Irán, Ali Beiranvand, ante un remate de Ziyach, fue lo destacado. Sin embargo, en el final habría una emoción.

 

Y es que en la última jugada, en una pelota parada cuando se disputaba el cuarto minuto de descuento Marruecos selló su derrota cuando Aziz Bouhaddouz defendiendo en el primer palo, intentó despejar el balón con su cabeza pero no hizo más que introducirlo en su propio arco para la celebración del rival.

 

El partido (aburrido) del año. Irán gana en el 95 por autogol | Ciudad VLC
Gradas estuvieron llenas de hinchas que alentaron a sus equipos

Marruecos mereció más, indudablemente, atacó con todo lo que tuvo y sus jugadores tienen cierto reconocimiento y juegan en clubes de talla mundial.

 

Benatia, en la Juventus, Achraf en el Real Madrid; El Ahmadi en el Feyenoord, Ziyech en el Ajax de Ámsterdam. Amrabat también con buen juego en la Liga española con el Leganés… Pero esto es fútbol y está hecho de hombres, no de nombres.

 

Marruecos jugo mejor, pero su fútbol no fue muy regular y eso lo aprovechó Irán para marcar gol. En la segunda parte hubo varias interrupciones que perjudicaron a Marruecos que era el que proponía el juego.

 

Un equipo iraní desordenado pero guerrero como él solo, y una oncena marroquí con la misión de ganar sí o sí fueron las «culpables» de este partido muy poco vistoso, pero por momentos interesante.

 

Tras 90 minutos ambas selecciones no se habían hecho daño, pero todo terminó como nadie lo esperaba: con una victoria de Irán, pero gracias a un gol marroquí.

 

En la que es su quinta participación en copas del mundo, Irán obtuvo su segunda victoria: fue un hito histórico. Por el contrario, los marroquíes perdieron un invicto de 18 partidos y también sufrieron un tanto en contra, algo que no había sucedido en todas las eliminatorias.

 

Esto es fútbol chico. Solo un un mundial hace que nos quedemos 95 minutos pegados a un televisor para ver un partido como este.

 

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Ely Reyes/Ciudad VLC

 

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