El ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Nestor Reverol, declaró que el exconcejal Edmundo “Pipo” Rada, dirigente del partido opositor Voluntad Popula,r fue asesinado por celos, y que su expareja estaría implicada en el homicidio.
A pesar de las falsas matrices de opinión que pretendieron calificar el desafortunado suceso como un crimen político, las investigaciones arrojaron las verdaderas motivaciones.
Tibisay Vilera Pérez (34) estuvo presente cuando le dispararon en la cabeza y resguardó el cadáver por 15 horas dentro de su casa, ubicada en el Barrio Unión de Petare.
Vilera Pérez, detenida por funcionarios de la División de homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), relató lo sucedido.
El día 16 de octubre, la victima de 43 años fue a la vivienda de su expareja para entregarle un alimento para perros que había comprado en La Urbina.
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Allí se encontró con la pareja actual de Vilera Pérez, de nombre Anderson Miguel Dávila Machado (24), quien tras discutir con el hoy occiso desenfundó un arma de fuego y le disparó en la cabeza.
Ocultaron el cuerpo hasta el día 17, cuando procedieron a sacarlo en un vehículo para luego incinerarlo en una zona boscosa del Estado Miranda, según revelan videos provenientes de cámaras de seguridad mostrados por el ministro Reverol.
¿Qué ocurrió después?
Tras la muerte del exconsejal, Dávila llamó a tres personas para que lo ayudaran a deshacerse del cuerpo.
En sector Guaicoco, en La Dolorita, ubicado en el barrio popular Petare, unas cámaras de seguridad captaron el momento cuando el cuerpo de Rada era lanzado a la vía.
El vehículo donde trasladaron el cuerpo iba acompañado de una moto, el 17 de octubre pasadas las 2:00 de la madrugada.
El cadáver del exconcejal Edmundo Rada se halló parcialmente incinerado en el sitio, presuntamente por Anderson Dávila Nerio, Nerio Otamendi y Keiler Duarte.
