Ayer comenzamos este espacio con la opinión de un miembro de la Cámara de Comercio de Bogotá y de la oligarquía colombiana, mediante la cual llama a priorizar la «economía» en estos tiempos de pandemia.
Hoy le damos paso a una mujer, columnista del diario colombiano El Espectador, subdirectora del IBRACO, Instituto de Cultura Brasil Colombia, y docente de la Universidad del Externado: Beatríz Miranda.
Le recomendamos este análisis y díganos qué opina usted.
Luis Salvador Feo La Cruz
DESDE EL SUR
El COVID-19 y el nuevo orden mundial
Por: Beatriz Miranda
Mientras el número de contagiados por el coronavirus empieza a bajar lentamente en Italia y España, la pandemia asola sin piedad a Estados Unidos, principalmente a Nueva York.
El dramático escenario de Estados Unidos, la tragedia de Ecuador, el alto número de contagiados en Brasil y en Chile, la duda de muchos países de la región en prorrogar la cuarentena o poner en marcha un aislamiento responsable incita a algunas reflexiones geopolíticas importantes.
Pandemia en China está bajo control
1) Después de días y días sin tregua, con solidaridad y apoyo de muchos países, hay evidencias de que la pandemia en territorio chino ya está bajo control.
Hubei, la provincia China en donde todo empezó, ha registrado mucho menos casos de coronavirus, lo que ha permitido suspender progresivamente el aislamiento social.
Después de dos meses de cuarentena, Hubei empieza a retornar a la normalidad, abre sus fronteras y su comercio y la gente, lentamente y con medidas de protección, empieza a salir a las calles.
Ahora China está ayudando en otros lugares del mundo a combatir el coronavirus. Quién esperaba que China, después de la pandemia saldría debilitada, se equivocó tremendamente.
Primer país en afrontar el contagio acelerado de su población, China lega al mundo importantes lecciones de disciplina, tenacidad y resistencia.
En estos días en que el coronavirus se expande por el globo, China esta dando ejemplo de gestión de la crisis y solidaridad internacional.
EE.UU se convierte en el epicentro del Covid-19
2) Estados Unidos, la potencia número uno, se convierte en el epicentro de la pandemia, con 1.200 personas fallecidas en las últimas 24 horas, registra 10.000 muertos y aproximadamente 337.000 contagiados.
Las ciudades más afectadas son Nueva York y Nueva Orleans.
El dramático escenario norteamericano evidencia el manejo errático del gobierno del presidente Donald Trump ante la crisis sanitaria y la debilidad del sistema de salud nacional.
En una actitud puramente ideológica, ignoró los protocolos creados por el gobierno Obama para afrontar una posible pandemia.
El presidente Trump y su gabinete demuestran, a la región y al mundo, cómo algunos líderes renuentes a tomar decisiones efectivas o con visiones predominantemente económicas pueden convertirse en amenazas nacionales.
En los últimos días, el mandatario estadounidense se vio obligado a aceptar ayuda humanitaria proveniente de Beijing y equipo médico enviado desde Rusia.
El coronavirus desafía el tablero geopolítico del mundo y empieza un impredecible reordenamiento global.
Acecho contra Venezuela
3) A pesar de este panorama, la cúpula del gobierno venezolano fue declarada narcoterrorista por Estados Unidos: el presidente Nicolás Maduro, 10 ministros, dirigentes políticos del Partido Socialista Unido de Venezuela, dos exmilitares y el presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Maikel Moreno.
Según el Procurador-General de Estados Unidos, Wiliam Barr, Maduro fue acusado de comandar un cartel de drogas y ofrecen por su captura 15 millones de dólares, al estilo del viejo oeste. ¡Justo en año electoral en Estados Unidos!
Silencio cómplice del Grupo de Lima
4) El silencio y la ineptitud del Grupo de Lima ante la pandemia, que se expande en el continente, confirma la superficialidad de sus objetivos regionales y que la principal pauta de su agenda es derrocar a Maduro, crear un muro de contención a los movimientos populares y mantenerse sumiso y alineado a los intereses estratégicos de Estados Unidos en la región.
Recientemente, el mandatario venezolano advirtió en varios medios internacionales que “las acciones de la Marina estadounidense el último miércoles 3 en el Mar Caribe y en la proximidades del territorio venezolano, bajo el pretexto de una guerra contra el narcotráfico, son las mayores maniobras militares de los Estados Unidos en los últimos 30 años en nuestra región, con el objetivo de amenazar a Venezuela, iniciando un costoso y sangriento conflicto militar sin fin» que probablemente se extenderá a nivel regional.
Independientemente de rumores, desmentidos, intercambio de twitters, la prioridad de los países que conforman el Grupo de Lima debería ser la atención a la crisis sanitaria, social y económica provocada por el Coronavirus, pero pareciera ser que están dispuestos a apoyar una intervención armada en Venezuela, sin calcular las consecuencias de esto sobre sus países y la región.
¡Tal es la insensatez! ¿Hasta cuándo América Latina se va a unir a guerras ajenas? Con la fuerte estigmatización y desmantelamiento del MERCOSUR, UNASUR y CELAC y la falta de credibilidad de la OEA, América Latina sigue careciendo de instituciones regionales serias y autónomas, lo que queda más claro en momentos como el actual.
Era post cornavirus
5) En la pandemia emerge una vieja disyuntiva: el fundamentalismo del mercado libre frente al papel del Estado y la necesidad de una mínima regulación del mercado en la era post coronavirus, pues la necesidad de proteger la vida y de consolidar un sistema de salud, con alcance universal, es cada vez más urgente. La vida es una condición esencial para la sobrevivencia de la economía.
Cuba y sus gestos solidarios
6) ¿Las sanciones internacionales deben persistir en tiempos de pandemia? En los últimos días, Cuba fue impedida de recibir ayuda humanitaria – kits de tests para diagnosticar el Covid 19 y respiradores enviados por la empresa China Alibaba -.
No pudo ser entregada debido al bloqueo y sanciones impuestas por la Ley Helm-Burthon (1996).
Alibaba envió cargamentos similares a japón. Corea del Sur, Italia, España, Irán, Etiopia y a otros 23 países asiáticos.
Sin embargo, Cuba en un gesto solidario sigue enviando médicos y enfermeros a varias partes del mundo.
Convencida de su diplomacia de la salud, tanto en el plan humanitario, como en el económico, en 2005 el presidente Fidel Castro creó el Henry Reeve (Contingente internacional de médicos especializados en situaciones de desastres y graves epidemias).
¡Un fuerte aplauso a los profesionales de la salud de Cuba y de todo el mundo por su acción profesional y solidaria! ¡Que de algo tan doloroso, matices de un nuevo mundo puedan surgir!
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Ciudad VLC
