Un extraño fantasma recorre y visita a los gobiernos neoliberales de América Latina. Por momentos les despoja del traje y de la indumentaria con la que se presentan como consecuentes demócratas, como paladines de la libertad y de la justicia.


En Perú se desata una crisis política que les lleva a la dimensión de “lucir” dos presidentes, y en Ecuador un mandatario converso enarbola un paquete económico, al estilo FMI, que genera una masiva movilización de protesta y, con ello, el decreto de un estado de excepción y el traslado de la sede del gobierno de Quito a Guayaquil.

gobiernos neoliberales-perú


Los gobiernos neoliberales de ambos países, trajeados de toga y birrete, muy activos en los últimos meses dictando cátedra de constitucionalidad, de libertad, de defensa de los derechos humanos, de rectitud, de pulcritud en lo que atañe a la función de Estado y a la administración de política, de pronto se encuentran desnudos, viviendo y haciendo lo contrario.

¿Qué dirá el Grupo de Lima?

El llamado Grupo de Lima, creado para ejecutar los designios de Washington contra la Revolución Bolivariana, ha expresado en varias ocasiones su “Condena enérgica a la represión del régimen ilegítimo y dictatorial de Nicolás Maduro…”.


Hoy, ¿qué balance tendrá el Grupo de Lima de la crisis política que atraviesa Perú, más allá de tener a sus expresidentes, procesados por corrupción y por violación de los DD.HH., incluyendo al simpático perrito Pedro Pablo Kuczynski, fundador del también denominado Cartel de Lima?Igualmente, ¿cuál será la posición el citado cartel por las fotos, del interino de Venezuela, abrazado y gustoso con jefes terroristas (narco paramilitares) que operan en el territorio de Colombia?

LEE TAMBIÉN: ANÁLISIS: FMI Y EMPRESARIOS GOBIERNAN HOY ECUADOR


Le corresponderá a la OEA tener a mano una respuesta a los hechos que ocurren en Perú y en Ecuador, sin observar los niveles de represión, en el caso ecuatoriano.


Rafael Correa y Nicolás Maduro y los migrantes venezolanos estarán en la primera línea de tales justificaciones. Asombran las cosas de ese extraño fantasma que se pasea por los gobiernos de derecha de Latinoamérica; provocando reacciones inesperadas.

¿Vizcarra demócrata y Maduro dictador?

Que a un indiscutible demócrata como Martín Vizcarra no le tiemble el pulso para cerrar el parlamento, muy contrario a lo que no ha podido hacer “el dictador Nicolás Maduro en Venezuela”, es altamente sorprendente. Así, los sesudos analistas de la derecha pudieran sostener que Maduro no ha tenido tiempo de cerrar la Asamblea Nacional porque ha estado ocupado entregando viviendas al pueblo.


De manera sorpresiva, un tanto caricaturesca, un día el Perú amaneció con la agudización del conflicto entre el Ejecutivo y el Poder Legislativo. Llegando al extremo de contar con dos presidentes.

gobiernos neoliberales


Martín Vizcarra procedió a disolver el Congreso del Perú y este ente, a su vez, respondió con la suspensión del mandatario, y de seguida nombró presidenta en funciones a la vicepresidenta Mercedes Aráoz, quien horas más tarde presentó sus renuncias a la vicepresidencia y a la presidencia vía tuit. Desatando una crisis institucional.

El FMI: el sepulturero del neoliberalismo

El converso Lenin Moreno, quien llegó a la Presidencia de Ecuador en el 2017 con los votos del Movimiento Alianza País, liderado por el expresidente Rafael Correa, proclamaba como suyos los objetivos del socialismo del siglo XXI, ejecutando los cambios propuesto con la Revolución Ciudadana.


Este episodio se repite con nitidez en la historia. El converso tiende a abrazar con más fuerza su “nueva” creencia, necesita ser reconocido y aceptado por quienes una vez enfrentó. De tal manera que no es sorpresivo el reencuentro del Fondo Monetario Internacional (FMI) y las otras instancias del multilateralismo de endeudamiento con el Ecuador.

Cada vez que el FMI ha intervenido en Ecuador, siempre han surgido resultados traumáticos para la economía y para la vida social. No es necesario acudir a la historia para recordar las andanzas del ente financiero, con sus consecuencias, no sólo en América Latina. Sólo basta señalar la debacle actual en la que se encuentra Argentina y el gobierno de Mauricio Macri, otro de los gobiernos neoliberales en crisis en la región.

Cuando habla de un “correísmo” acepta que hay un “morenismo”

Una vez en el gobierno, Moreno se encaminó a remarcar la existencia de tendencias dentro de las filas de la Revolución Ciudadana, diferenciando su actitud de la tendencia que llamó “correísmo”. Al punto, no sólo de llevar a prisión al exvicepresidente Jorge Glas, sino ir al trofeo más preciado: judicializar a Rafael Correa, en total sintonía con lo que ocurre con Lula Da Silva en Brasil y Cristina Fernández de Kirchner en Argentina.


Moreno ha intentado mostrarse más antichavista que Álvaro Uribe Vélez o más reaccionario que el magnate Donald Trump: “Nosotros no reconocemos al señor Maduro como Presidente, hemos manifestado nuestro respaldo a la decisión soberana de la Asamblea (ONU) y le hemos manifestado nuestro respaldo al señor Guaidó como presidente del país, inclusive él ha designado ya su embajador, al cual hemos dado ya el beneplácito”.

No sólo está en excepción el Estado… se refugia en Guayaquil


Hoy Ecuador se encuentra bajo el decreto de un estado excepción a consecuencia de las firmes protestas populares originadas por la decisión del presidente Moreno, quien había anunciado un reacomodo financiero, directo, y en total sincronía con las políticas de reducción de gastos del Ejecutivo.


En estos anuncios incluye, entre otros, la eliminación de los subsidios para el uso de los combustibles y la liberación de los precios de la gasolina extra y extra con etanol, al igual que el precio del diésel. Decisión que repercutirá en el transporte y por consiguiente en los alimentos, medicinas y otros rubros.

gobiernos neoliberales


Estas decisiones propias de gobiernos neoliberales que hoy rechaza gran parte del pueblo ecuatoriano recibieron la bendición del FMI. Desde un comunicado fechado en Washington, el ente indicó que las medidas adoptadas tenían como objetivo “mejorar la resiliencia y la sostenibilidad de la economía ecuatoriana”.


Ante el anuncio de reiteradas marchas en la capital ecuatoriana y la llegada de un contingente de unos 20 mil integrantes de los pueblos indígenas, el mandatario Lenín Moreno informó que se había trasladado la sede del gobierno de Quito a Guayaquil.


“Me he trasladado a Guayaquil y he trasladado la sede del Gobierno a esta querida ciudad de acuerdo a las atribuciones constitucionales que me competen”, dijo el jefe de Estado en un mensaje transmitido en Cadena Nacional.

LEE TAMBIÉN: BALANCE DE LAS PROTESTAS EN ECUADOR: 5 MUERTOS, 929 DETENIDOS Y 554 HERIDOS


El fantasma que acecha a estos gobiernos neoliberales no sólo se pasea por Perú y Ecuador también hace de las suyas metiéndole miedo al presidente real de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, mientras que por los lados del Río de la Plata, el candidato Alberto Fernández anunció que, de llegar a la Casa Rosada, la Argentina se retirará del Grupo de Lima.

William Hernández / Ciudad VLC

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here