Un tribunal de Moscú condenó este lunes a un exsoldado estadounidense a dieciséis años en una prisión de alta seguridad tras encontrarlo culpable de la acusación de cargos de espionaje.
Paul Whelan fue detenido en Moscú, en 2018, «durante la realización de una acción de espionaje» según el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB), luego de recibir de un amigo ruso una memoria USB con material clasificado.
Sin embargo, él y sus abogados alegan que se encontraba en la capital rusa para la boda de un conocido, y no sería la primera vez que viajaba a Rusia.
Whelan, quien también posee las ciudadanías británica, irlandesa y canadiense; ha estado recluido en una prisión de alta seguridad en Moscú desde su arresto en 2018.
Durante sus alegatos finales el exsoldado estadounidense expresó que es inocente y solicitó, por tanto, la absolución.
Tinker, Tailor, Soldier, SPY
Un tribunal de Moscú condenó a Paul Whelan, un ex marine estadounidense, a 16 años en una prisión de alta seguridad por cargos de espionaje. Fue arrestado en una habitación de hotel en Moscú hace 18 meses con un USB que contenía secretos de estado. pic.twitter.com/TfJfVMkk1X— La Nave Comunica (@lanavecomunica) June 15, 2020
La embajada estadounidense en Moscú ha seguido de cerca el proceso judicial y confirmó que Whelan ocupaba el cargo de director de seguridad en la empresa BorgWarner, la cual produce componentes para la industria automotriz.
La familia del exsoldado, así como sus abogados, han dicho que su detención, el juicio y ahora su condena serían una herramienta para aumentar su valor en un posible canje futuro por rusos detenidos en Estados Unidos.
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Ciudad VLC / Telesur
