Turquía inició ataque contra el norte de Siria la noche de este miércoles, en una operación terrestre y aérea contra la milicia kurda, informa el Ministerio de Defensa del otrora Imperio Otomano.
Este 9 de octubre, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, confirmó el inicio del operativo militar “Fuente de paz” en el norte de Siria, cuyo objetivo es «destruir el corredor del terror en la frontera sur (turca) y traer la paz a la región».
«Las Fuerzas Armadas turcas han iniciado, junto con el Ejército Nacional Sirio, la operación ‘Fuente de Paz’ en el norte de Siria», indicó Erdogan, utilizando el nuevo nombre de las milicias sirias aliadas de las tropas turcas y anteriormente conocidas como «Ejército Libre de Siria».
La cadena CNNTürk muestra en directo la imagen de columnas de humo procedentes de la ciudad fronteriza, controlada por las YPG, y asegura que se oye un continuo sobrevuelo de cazas.
Momentos después, la agencia oficialista turca Anadolu informó sobre disparos de artillería turca desde el municipio fronterizo de Akçakale contra la localidad siria de Tel Abiad, situada 100 kilómetros al oeste de Ras al Ain.
De igual forma, la prensa turca indica que los ataques de artillería y aviación sirven para debilitar las defensas del YPG.
Por su parte, Mustafa Bali, portavoz de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), informó del inicio de bombardeos aéreos y acusó a los aviones turcos de atacar áreas civiles, creando «enorme pánico entre la población».
«Aviones turcos han comenzado a llevar a cabo ataques aéreos contra zonas civiles. Hay un gran pánico entre la gente de la región», indicó Bali en su cuenta de Twitter.
Invasión turca busca controlar el territorio sirio
Turquía aspira a controlar una franja de 32 kilómetros de ancho y 480 de largo, dentro del territorio sirio, desde el Éufrates hasta Irak, una zona hasta ahora dominada por las YPG, que establecieron una administración local propia que incomoda a Ankara.
A finales del año pasado el mandatario turco amenazó con lanzar una operación militar unilateral en el norte de Siria contra las FDS, conformadas por unos 60 mil combatientes.
Una parte integral de esas fuerzas corresponde a las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo).
Turquía considera a las YPG un grupo terrorista y una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán turco, también calificado como organización terrorista por Ankara.
En respuesta a la ofensiva, las FDS atacaron con morteros la ciudad turca de Nusaybin.
Mientras tanto, la agencia Anadolu reporta que dos proyectiles lanzados desde territorio sirio impactaron en Ceylanpinar, otra ciudad turca fronteriza.
Por otra parte, los kurdos sirios llamaron a EEUU a establecer una zona de exclusión aérea para poner fin a los ataques de la aviación turca.
«Puñalada por la espalda» de EEUU
Las fuerzas turcas alcanzaron un total de 181 objetivos de militantes con ataques aéreos y obuses desde el inicio de la operación contra la milicia kurda en el norte de Siria, informa el Ministerio de Defensa turco.
Las FDS informan que un ataque aéreo turco el miércoles alcanzó una prisión donde se encontraban recluidos terroristas del Estado Islámico.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos estima en ocho el número de civiles muertos en la operación militar turca, informa la agencia AP.
Por su parte, el Centro de Información de Rojava, un colectivo activista en el noreste de Siria, reporta siete víctimas mortales civiles.
La Casa Blanca informó anteriormente que «no apoyará ni participará» en la ofensiva de Turquía, ya que las tropas estadounidenses ya no estarán en «los alrededores».
Desde las FDS tacharon de «puñalada por la espalda» la decisión de Washington de retirar sus tropas de la zona y añadieron que no dudarán «ni por un momento defender» a su pueblo de las tropas turcas.
Ciudad VLC / Actualidad DW y RT.
